LA BALEADA ORGULLO CATRACHO
La deliciosa y popular Baleada es uno de los platos típicos más tradicionales y representativos de la comida hondureña, especialmente de la zona norte del país. Sin embargo, este típico bocadillo esconde un misterio detrás de su origen: ¿Dónde se inventó la baleada? y ¿Por qué se llama así?
De acuerdo a la información recogida por el historiador Julio Cesar Zepeda, las primeras compañías bananeras extranjeras y sus ejecutivos traían sus propios cocineros, la mayoría de los cuales eran de la India y Pakistán. Cocinaban alimentos de estilo occidental por sus empleadores, pero también cocinan sus comidas tradicionales como los Chapatis y el Naan.
Según las investigaciones de Zepeda, los chapatis fueron compartidos con la población local por estos cocineros extranjeros con la tortilla como resultado de las modificaciones a la receta con el tiempo. Estas modificaciones incluyen, pero no se limitan al uso de la margarina en lugar de mantequilla, o la adición de leche o leche de coco en lugar de agua. Así que aunque puede tener una influencia asiática es un alimento netamente catracho adaptado al paladar del pueblo hondureña.
Existen muchas historias y leyendas urbanas sobre el orígen de la baleada, pero entre todas destaca una muy curiosa, aunque con ningún sustento histórico: La historia de una mujer de San Pedro Sula que vendía tortillas envueltas. Ella era bien conocida por su deliciosa cocina. Un buen día recibió disparos de bala; algunos dicen que murió de sus heridas, otros dicen que no fue grave porque se recuperó pronto y volvió a vender tortillas. Desde entonces, los trabajadores dijeron “Voy donde la baleada” (“la mujer baleada”).
Otra historia viene de La Ceiba. En 1964, Doña Teresa, una mujer de 20 años, fue abandonada por su esposo y decidió solicitar un préstamo para iniciar su negocio de vender tortillas para mantener a sus cinco hijos. El negocio estaba ubicado cerca de la línea de ferrocarril donde el tren transportaba a los empleados de la Standard Fruit Company, quienes rápidamente se convirtieron en clientes. El plato pronto se convirtió en el favorito de los trabajadores de la compañía, los transeúntes y las personas que trabajaban en las cercanías, pero no tenía nombre. Un día, un cliente que estaba comiendo hizo un comentario divertido: “los frijoles son balas, el queso es la pólvora y la tortilla es la pistola”, así que todos empezaron a llamarlos “baleadas”.
Otros dicen que el nombre se originó porque cuando la gente estaba mordiendo las tortillas, la presión de la picadura hacía que los frijoles “ardieran” por los lados de la tortilla. Muchos dijeron que actuaron a favor de las balas, así que comenzaron a llamar al nuevo plato “Baleada”.
Sin duda, la verdadera historia de la baleada seguirá siendo un misterio, pero sin importar su origen, sabemos que es el platillo hondureño por excelencia.
コメント