Las vacunas son una herramienta, pero no le ponen fin a la pandemia
Actualizado: 10 ago 2021
Tegucigalpa. La directora de la Escuela de Microbiología de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Ekaterina Bonilla, aseguró que con el COVID-19 nada está dicho porque este virus está mutando.
A la fecha se reportan más de 300 mil contagios del virus, y más de 8 mil personas que han perdido la vida por esta enfermedad.
La preocupación de la comunidad científica es que el virus ya no solo afecta y mata a personas mayores con enfermedades de bases, sino que está impactando muy fuerte en jóvenes y niños sin comorbilidades.
“El coronavirus ya está fuera de control, tenemos un alto contagio de coronavirus y estos siguen elevando”, expresó.
“La vacunación es una herramienta que nos viene a apoyar, pero no es la solución definitiva, la solución es seguir con la planificación”, manifestó.
“Muchos países que han planificado han vuelto a altas olas de contagios, Estados Unidos tiene una alta incidencia en varios estados, ya había quitado las restricciones y las han adoptado nuevamente”, mencionó.
“Con el coronavirus nada está dicho, sabemos que los virus gripales tienden a mutar, por eso tenemos variantes y eso es lo que los hace a ellos resistir y mantenerse, así como la gripe y la influenza”, explicó.
Honduras avanza de manera muy acelerada en la vacunación contra el COVID-19, actualmente se está poniendo el refuerzo de la segunda dosis a más de dos millones de personas ya inoculadas con la primera dosis.
Miles de hondureños reciben su primera dosis cada día, pero eso no es motivo para dejar a un lado las medidas de bioseguridad.
“Las dos dosis no dan la seguridad de que la persona no se vaya a infectar o pueda llegar a un Unidad de Cuidados Intensivos porque esto depende mucho del sistema inmunológico”, dijo.
“Sabemos que las nuevas variantes han tomado un giro diferente al virus original, antes solo atacaba a personas mayores y de la tercera edad, actualmente los afectados en porcentaje alto es en los niños y adolescentes”, lamentó.
“El problema es que los niños no se pueden vacunar, la Pfizer se está aplicando de los 12 años de edad en adelante”, agregó.
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